La prueba EGA I contempla reactivos dedicados a la identificación y diferenciación de los elementos en los que podemos dividir una narración corta, un cuento. Estos elementos básicos son el narrador, los personajes, el espacio y el tiempo, sin embargo, sólo destacaremos los dos primeros.
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El narrador es quien cuenta la historia, es la "voz" ficcional que da cuenta de los acontecimientos de la diégesis. El narrador puede relatar la historia en primera persona (yo), segunda persona (tú) o tercera persona (él). De acuerdo con su participación en la historia también puede ser:
Homodiegético: participa en la historia, personaje.
Autodiegético: protagonista, cuenta su historia.
Extradiegético: omnisciente sabe todo en la historia.
Intradiegético: testigo.
Los personajes se clasifican en tres categorías.
1. Principales: puede protagonista e incluso antagonista. Son más detallados que otros personajes y sin el protagonista no hay historia.
2. Secundarios: son menos definidos que los principales y generalmente ayudan al protagonista a lograr sus objetivos.
3. Ambientales: similares a los "extras" en el cine, sirven para ambientar o contextualizar la historia.
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Métrica y otros conceptos
Los versos se clasifican de acuerdo con su número de sílabas. Si el verso tiene ocho o menos sílabas se considera de arte menor y si tiene de nueve sílabas en adelante es de arte mayor.
Versos de arte menor:
Dos sílabas: bisílabos
Tres sílabas: trisílabos
Cuatro sílabas: tetrasílabos
Cinco sílabas: pentasílabos
Seis sílabas: hexasílabos
Siete sílabas: heptasílabos
Ocho sílabas: octosílabos
Versos de arte mayor:
Nueve sílabas: eneasílabos
Diez sílabas: decasílabos
Once sílabas: endecasílabos
Doce sílabas: dodecasílabos
Trece sílabas: tridecasílabos
Catorce sílabas: alejandrinos o tetradecasílabos
Quince sílabas: pentadecasílabos
Dieciséis sílabas: sexadecasílabos
Para obtener la métrica de un verso es necesario contar las sílabas, sin embargo, este conteo silábico no es gramatical. La métrica exige tomar en cuenta otros parámetros que a continuación explicamos.
Regla del acento final: si la última palabra del verso es aguda sumamos una sílaba; si fuera grave no se altera el número de sílabas y si la última palabra es esdrújula se resta una sílaba al verso.
Sinalefa: cuando una palabra termina en vocal y la siguiente inicia en vocal, ejemplo, mu-tuoin-te-rés.
Hiato: cuando se rompe la sinalefa, generalmente por una sílaba tónica o presencia de tilde, ejemplo, La-ú-ni-ca-ver-dad.
Sinéresis: dos vocales que no hacen diptongo, se pronuncian como si lo fueran, ejemplos, cae, dia.
Diéresis: ajusta la métrica a los intereses del autor, alarga una palabra mediante la ruptura de un diptongo poniendo una diéresis donde se quiera romper ese diptongo, rü-i-do.
