Autobiografía

A mis 13 años de edad quizá se piense que no tengo mucho que contar y que simplemente mi vida va a ser descrita como cualquier otra. Sin embargo, cuando analizamos cada detalle de nuestras vidas. Y esta es mi autobiografía desde mis primeros recuerdos hasta llegar a vivir con mi madre.    Mi nombre es Brittany Naomi Rueda Gómez, como dije tengo 13 años de edad, nací en Zacapoaxtla, Puebla. Desde que nací fui criada por mis abuelos paternos, por lo que una de mis figuras maternas es mi abuela, estuve bajo sus cuidados los primeros ocho años de mi vida. Por supuesto, mi madre biológica estaba presente en mi vida durante ese tiempo, viajaba todos los fines de semana desde Zacatlán hasta Puebla para visitarme, su trabajo le reducía el tiempo para mí. En tanto a mi padre, no tengo muchos recuerdos de él en mi infancia, a pesar de esto, sé que estuvo presente porque existen fotos que lo comprueban, pero eso no es suficiente para mí y que lo recuerde. Me enviaron a una estancia infantil, en donde enseñaron a cómo utilizar los cubiertos, lavarme los dientes, amarrarme las agujetas, hasta leer. Cuando entré a la primaria, mis abuelos ya habían adquirido una casa propia, así que me fui con ellos y cursé en una escuela primaria cercana de 1º a 3º, durante estos años la casa de mis abuelos se iba modelando poco a poco. En 4º de primaria, mi madre ya se había adueñado de una casa, dejé de vivir en la casa de mis abuelos y mi madre y yo empezamos en un nuevo lugar, nueva escuela tanto para mi como para ella; en mi caso fue el Colegio la Salle, y para ella una nueva escuela en donde trabajar, cerca de mí. Y ahí comenzó a relacionarse más conmigo, con su hija.  Aunque esto sucediera, no corté el lazo que había creado con mis abuelos, de paso también a mi padre, a ellos los visitaba todos los fines de semana, hospedándome en su casa,  visitando lugares cercanos, o acudiendo a reuniones familiares, lo que fuera lo disfrutaba. Y volvía a regresar a mi casa para seguir continuando con mis estudios, poco a poco me fui acostumbrando a la distinta rutina y personas cercanas que se presentaron al comenzar a vivir con mi madre.