Redacción I: Estructura del texto, propiedades textuales y párrafo

Redacción

En esta sección se mide tu competencia para redactar textos académicos de manera clara y eficiente. Debes tomar en cuenta las propiedades textuales, los tipos de párrafos y su organización, así como los recursos estilísticos. Los temas fundamentales que debes estudiar son los siguientes: Estructura del texto: estructura semántica (una idea principal e ideas complementarias) y estructura formal (cohesión y puntuación). Cohesión y coherencia: uso de conectores, adición y elisión de oraciones. Recursos literarios: figuras literarias aplicadas al texto con un fin estético. Errores comunes en el texto: vicios del lenguaje.

Estructura del texto

El texto se compone de párrafos que pueden ser introductorios, de desarrollo o de conclusión. Ahora bien, cada párrafo debe ser monotemático, es decir, desarrollar un solo tema. Otra consideración importante es que un párrafo tiene una extensión mínima de tres oraciones y una máxima de siete, aunque la noción de "párrafo ideal" de acuerdo con el Instituto Cervantes (2013) contempla entre cuatro y cinco oraciones (o entre 100 y 150 palabras distribuidas en máximo cinco oraciones).  Cabe destacar que además de estas características un párrafo también se delimita por el punto y aparte. Por último, debemos destacar que la escritura de un texto debe tener en cuenta las propiedades textuales: Adecuación: consideración del contexto en el que se va a desempeñar el texto. Cohesión: uso apropiado de nexos, pronombres y signos de puntuación para tener un texto ordenado y comprensible. Coherencia: unidad temática y comunicativa, partir de un tema general que avance de manera progresiva en el tema y no presente disrupciones. 

  Antes mencionamos que existen párrafos de introducción, desarrollo y cierre, eso mismo ocurre al interior del párrafo pero con unidades más pequeñas, es decir, con las oraciones. Las oraciones que forman un párrafo también pueden ser introductorias o iniciales, de desarrollo y de cierre. Cada párrafo desarrolla una idea, o en otras palabras presenta un nodo temático, cuando este tema se desarrolla y se inicia uno nuevo, también debe iniciarse un nuevo párrafo.