Haciendo de nuestra
Biblioteca Escolar un
espacio que invite a la
lectura
¿Qué hace que nuestra biblioteca no sea un
lugar más frecuentado?
la aparición de entornos virtuales
relacionales y comunicativos han sustituido
a la transmisión escrita
La biblioteca es un lugar dotado de
medios y recursos
En numerosas ocasiones, la biblioteca se
utiliza como aula complementaria o
lugar de estudio
El mobiliario de la biblioteca no
es cómodo, suele ser poco
ergonómico.
Las bibliotecas escolares ofrecen
múltiples posibilidades para actividades
individuales y colectivas
La imposición del silencio que
impide trabajar de manera
colabotrativa
la biblioteca no suele ser un
espacio flexible
¿Por qué es importante que nuestros
alumnos se aficionen a la lectura?
La falta de competencia lectora tiene como
consecuencia un déficit de alfabetización informacional
La lectura mejora la competencia
comunicativa de nuestros alumnos
La lectura favorece la
igualdad de oportunidades
Gracias a la lectura los alumnos se
implican en su propio aprendizaje
La lectura contribuye al desarrollo de la
personalidad
¿Dónde se deben desarrollar las actividades
de aprendizaje relacionados con la
promoción de la lectura?
¿En qué otros lugares se pueden llevar a
cabo programas de animación a la lectura?
En la red: páginas web, blogs de biblioteca;
bitácora de lectores, wikis, etc
Las bibliotecas escolares suelen
tener un horario muy reducido
Aulas, pasillos y demás dependencias del
centro son espacios en los que se puede
promocionar el hábito de la lectura y el
uso de la biblioteca escolar
Podemos aprovechar los medios
digitales para promocionar los
fondos de la biblioteca y las
actividades que en ella se
desarrollan
No suele ser habitual que las familias puedan
participar en las actividades de fomento de la
lectura
¿Cuándo podemos integrar en el
proceso educativo la lectura?
Nuestro sistema educativo
fomenta la mera adquisición de
contenidos frente al disfrute del
aprendizaje
A lo largo de todo el curso escolar: festejando las efemérides relacionadas con la
literatura, los idiomas, el conocimiento; realizando actividades -tanto en el
horario escolar como fuera de él- de carácter participativo (tertulias, cafés
literarios, clubes de lectura, cuentacuentos, lecturas dramatizadas, etc) y de
carácter creativo (exposiciones, yimkanas, noches temáticas, talleres,,, ...)
Aparte de integrar la lectura en el currículo
deberíamos introducirla en las actividades
encaminadas a la adquisición de destrezas
de búsqueda de información bibliográfica y
digital
Si aprovechamos el potencial de los medios
digitales, en cualquier momento del proceso
educativo de nuestros alumnos
¿Quienes pueden tomar parte en las
actividades de animación a la lectura?
Los propios alumnos pueden ser importantes
agentes en el desarrollo de planes y programas
de fomento de la lectura
Los tan habituales cambios en los equipos
docentes suelen tener como consecuencia
que una buena parte de los proyectos no
tengan la duración -y la proyección- deseada
Hay que dejar espacio a la participación de
las familias ya que son fundamentales en
el desarrollo del hábito de la lectura
Es un factor positivo contar con la colaboración de
organismos (ayuntamientos, otros centros educativos,
bibliotecas municipales, centros de juventud, etc.) y
asociaciones del entorno del centro escolar a la hora de
desarrollar los distintos proyectos
¿Cómo podemos convertir nuestras bibliotecas en lugares
mágicos que atraigan a nuestros alumnos y les animen a
leer?
Compartiendo la
lectura
Haciendo que todos los alumnos se
sientan capaces de aprender y
progresar
Implicando a las familias (AMPA) en el
proceso formativo de sus hijos
Atendiendo a la diversidad de los alumnos con
lecturas y escritura en función de su capacidad, su
experiencias culturales y su motivación
Haciendo a los alumnos partícipes en la toma de
decisiones relacionadas con la biblioteca (colección,
decoración, programación,...)
Facilitando el acceso a los
recursos
Vinculando la lectura y la escritura a
las vivencias personales de nuestros
alumnos