Verduras y frutas :Son fuente de
vitaminas, minerales, fibra y agua. Se
recomienda consumir al menos 400 g
al día, preferentemente crudas y de
temporada
Cereales y Leguminosas: Son
fuente de energía, vitaminas,
minerales y fibra. Se deben
consumir con moderación.
Origen animal :Son fuente
de proteínas, energía y fibra. Se
recomienda preferir pescado o pollo
sin piel sobre las carnes rojas.