Pídele a un amigo o a un colega que evalúe honestamente tu descripción.
¿Describe realmente lo que haces? Si no es así, tienes que priorizar el trabajar en esta frase, porque es básica para ayudar a alguien a decidirse comprar tus productos o servicios.
Si no entienden lo que haces tus clientes potenciales no van a comprarte. Y dicho sea de paso, si no defines claramente lo que quires hacer, ¿cómo te vas a guiar?
No olvides la importancia de ser “diferente”. Si no te diferencias de tus competidores, si eres un “restaurante”, “peluquería" o “garage” más, ¿por qué te van a comprar a ti?, ¿qué diferencia hay en comprarte a ti que a tus competidores?
Diferénciate con una o varias cosas: da un excelente servicio al cliente, crea una única comunidad de fans en tu página Facebook, ofrece regalos que los otros no dan, ten a los empleados más sonrientes del mundo (tipo Disney). Tienes muchas maneras de diferenciarte para capturar la atención de tus clientes potenciales.
Y obviamente esta diferencia enfatízala en toda tu comunicación: en tus sitios web, en tus cuentas sociales, en tu blog, en tus publicidades impresas, etc.
¡Este punto es imprescindible para tener éxito en tu negocio! ¡No comiences a postear en Facebook, tuitear en Twitter, o lanzar publicidades si no haz definido bien tu mercado objetivo!
Para quitarte las ganas de lanzarte sin conocer a quién te quieres dirigir, te comentamos desde ya que todas tus estrategias de marketing no llegarán a ningún lado si no defines bien tu segmento de mercado.
Hay muchas maneras de promocionar tus productos, muchos canales para hacerlos… ¡Pero no puedes usarlos todos! Busca los mejores medios de marketing para tu mercado.
¿Escuchan más la radio o leen revista especializadas? ¿Están más en Twitter o en Facebook? ¿Les gusta la exclusividad de los precios caros o son un mercado masivo de precios baratos?
Define la mejor estrategia para el segmento de mercado al que te diriges.
Cuanto más consistente sea tu mensaje, mejor vas a posicionar tu empresa o tus productos y servicios en la mente de tus clientes potenciales.
Además recuerda que ahora tus clientes potenciales te pueden ver por una enorme cantidad de medios de comunicación (Facebook, Twitter, anuncios en el periódico, anuncios en internet, en revistas, blogs, forums..), y lo menos que deseas es confundirlos, ¿no?
Esto puede influir enormemente su decisión de compra.
Nadie quiere pasar más de 2 minutos viendo un video publicitario en YouTube, ver un post en Facebook de 20 líneas o leer un artículo de blog de 5 páginas. Sé breve y ganarás la atención de tus clientes potenciales.
Esto no significa ser un comediante, sino que no escribas, por ejemplo, un artículo de blog aburridísimo acerca de la grandiosidad de tus productos y servicios.
Más bien céntrate en hacerlo más dinámico con testimonios de clientes y fotos (si es posible).
Tampoco hace falta que escribas simplemente un post aburrido de 10 líneas en Facebook, sino una pequeña frase insertando imágenes y videos. ¡Este es el tipo de comunicación que captura la atención!
Pues quizás puedes abrir una cuenta Facebook local para promocionarla, además de los anuncios en las revistas de tu ciudad.
¿Tienes un negocio online? Eso no significa que sólo debes promocionarte en las redes sociales. Muchas empresas, incluso de la web, participan enormemente en eventos y ferias comerciales, que son uno de los canales de marketing con más éxito de ventas.
¿Ya has aprendido lo importante que son las relaciones también para los negocios? Y gracias a internet, puedes hacer networking de manera mucho más rápida y sin importar las distancias geográficas (si tienes un negocio internacional), a través de redes sociales, especialmente Linked In y Twitter que son redes sociales más profesionales.
