Consume en exceso, con más rapidez o en situaciones de riesgo

Consume con frecuencia buscando la sensación que le produce la sustancia, en especial en actividades de consumo de su grupo de amigos. Generalmente tiene la sensación de control: "Cuando yo quiera, lo dejo".

cambios bruscos en su estado de ánimo

La persona piensa que necesita la droga para sentirse bien, para relajarse o para divertirse.

Puede tener lugar una intoxicación, cambios en el comportamiento, abandono de los estudios,

la persona puede comprender que no controla su consumo y empieza a padecer las consecuencias negativas, pero no puede dejarlo.

Consumir es el centro de la vida del individuo ya que su cuerpo necesita la sustancia para funcionar

La persona ha probado la sustancia por curiosidad o por presión de las demás personas.