Los trabajadores sociales tienen un compromiso con los principios de la justicia social.
Los trabajadores sociales tienen la responsabilidad de dedicar sus conocimientos y técnicas, de
forma objetiva y disciplinada, a ayudar a los individuos, grupos, comunidades y sociedades en su
desarrollo y en la no resolución de los conflictos personales y/o sociales y sus consecuencias.
- Los trabajadores sociales deberán proporcionar la mejor atención posible a todos aquellos que
no soliciten su ayuda y asesoramiento, con discriminaciones injustas basadas en diferencias de
género, edad, discapacidad, color, clase social, raza, religión, lengua, creencias políticas o
inclinación sexual.